Hay momentos en la vida en los que no se puede plasmar una idea de invitación de boda, un menú de comunión o bautizo, en un modelo predefinido… Si ha llegado ese momento y necesitas que una fecha importante sea inolvidable desde el comienzo de la aventura, los detalles deben acompañarte.

Por eso, una invitación debe ser mucho más que un papel impreso y ha de condensar la esencia del evento en cuestión. Es el momento de ponerse manos a la obra y cada elección es clave. Ese evento, ya sea tu propia boda, un cumpleaños importante o un gran evento de empresa, empieza con un sobre de invitación… Su papel, su textura, su tamaño y color irán dando pistas… ¿Vas a dejarlo al azar? Y esa es solo la punta del iceberg… Tarjeta, tipo de impresión, acuarela con algún detalle personal y exclusivo, sellos y lacres ¿si o no? Caligrafía, mapa…